EMANAR SENTIMIENTOS ES CRECER EN LA TERNURA DEL TIEMPO.

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domingo, 6 de julio de 2014

ME PERDÍ EN EL LABERINTO DEL TEMPO...







Me perdí en laberinto del tiempo
estrujando la calma
para no volverte amar
en el recuerdo.
Me perdí llorando
en primaveras floridas
otorgándome a la tristeza
 en mi alcoba cerrada;
durmiendo ambas abrazadas
 a la
 esfinge de la soledad.


                                                Fotocomposición: Rosa María Milleiro


Nota: Os pido disculpas por no comentar en vuestros Blogs, pero me es imposible por lo de ahora. Ello no significa olvido, sino circunstancia.
Un abraciño,
Rosa María Milleiro



8 comentarios:

  1. Esas soledades también llenan el alma. Besicos.

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  2. Hola querida Amiga : Un poema muy sentido, a veces es necesario la soledad, pero que no nos atrape....... creo que muchas veces estamos acompañadas, pero hay que percibirlo. Un abraciño inmenso!!!!

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  3. Prefiero perderme en mil laberintos de una soledad compartida que encontrarme a solas en el laberinto de la incomprensión humana.. Bellísimo poema como no podía ser de un alma no menos bella.. Feliz verano guapa. que brille el sol en tu corazón de poeta.. :-)))

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  4. Un abrazo Rosa M.
    te deseo lo mejor!

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  5. En algún momento todos nos perdemos en ese laberinto que citas.
    Un abrazo y que todo vaya bien.

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  6. Sencillo, bello y precioso. Un abrazo!

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  7. Me encanta verte con esa maravillosa sonrisa encabezando el blog.¡fantástica! Es el mejor regalo que puedes hacernos al asomarnos a tus páginas, cuando casi todo lo que se ve en nuestro entorno son caras largas y ceños fruncidos.

    La poesia, aunque breve, es de inmenso contenido. La soledad, da también sus frutos.

    Un cariñoso abrazo.

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  8. Creo que todos estamos perdidos en ese laberinto ignoto, y Dios sabe en cuántos más; todos, también, habremos dormido (al fin) como describes noches que parecían eternas. Mas el preciosismo con el que lo cuentas y la franca e informal sonrisa que uno se encuentra al llegar a tu casa disipan la tristeza como el viento la niebla. ¡Gracias! Y también, usted perdone, la innecesaria explicación de la nota.
    Un abrazo.

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Os agradezco vuestros comentario y visitas a mi blog
Rosa María Milleiro